Este proyecto se presenta como un experimento vivo de co-creación: un sistema híbrido donde el gesto humano, la gravedad digital y la máquina confluyen.

Un robot sostiene y manipula una pantalla que proyecta visuales generativos. Mediante un giroscopio, la inclinación de la pantalla se traduce en un campo de fuerzas virtuales: partículas digitales que responden a la Ley de la Gravedad modificada, cayendo o desviándose en función del ángulo, la aceleración, la aceleración angular.

Aquí, lo físico (el movimiento del robot, la inclinación del soporte) y lo digital (los algoritmos que rigen las partículas) se retroalimentan. La máquina obedece al código; el código modula la visualización; el humano actúa, contempla, provoca.

Lo que surge no es solo imagen en movimiento, sino una visualización de energía, información y cuerpo. Es la manifestación tangible del principio de co-existencia entre materia y mente, entre causa y potencialidad.

En Vitamin Studio redefinimos la “interfaz”: no es solo pantalla, no es solo robot, no es solo visual. Es un campo de interacción donde humano + máquina = sistema creativo expandido.

Una experiencia inmersiva que asume que la tecnología no es objeto, sino socio, que no es instrumento, sino co-autor.

Vitamin Studio invita — a través de este proyecto — a contemplar la máquina como extensión de la sensibilidad humana, y la materia como vehículo de pensamiento. En ese espacio intermedio, lo visual deviene pensamiento visible, lo técnico deviene metáfora, y lo interactivo deviene acontecimiento.